Que los patios de Córdoba son Patrimonio de la Humanidad, no es ninguna novedad y los cordobeses lo sabemos muy bien, pues de aquellas tardes de mayo paseando tranquilamente de patio en patio hace unos años, se ha convertido en colas y miles de turistas visitándolos. La apertura de algunos patios de forma permanente, o en Navidad, también fue un buen acierto. Pero la idea de unir los patios con la gastronomía y además hacerlo en horario nocturno, roza la genialidad. Por eso, durante el mes de junio y sólo los viernes y sábados de las 20h a 24h, puedes disfrutar una miniruta de ocho patios, donde disfrutar de las plantas tranquilamente (de momento no está masificado) y además ir probando algunas joyas gastronómicas de nuestra provincia. El único requisito, comprar un pasaporte (5€) en cualquiera de los patios y dejarse fluir por las callejuelas de la zona norte de los patios cordobeses.
De la mano de Chary Serrano (divulgadoras de estas iniciativa), tras llegar de Castro del Río, paseamos sin prisas por callejuelas estrechas y empedradas con aroma a incienso, pues procesionaba la virgen de la cabeza por ellas. Íbamos como insectos de flor en flor, más bien de multitud de flores en otras tales, aunque según el lugar, mezcladas con aromas de ibéricos, patés de aceitunas, aceite de oliva virgen extra y hasta quesos. De estos últimos no nos pudimos resistir a comprar de los Balanchares y de nuestro amigo Diego Plazuelo (jornada del Máster en Agroalimentación) que personalmente con su señora, vende sus quesos en el patio de las Beatillas. Incluso te pueden aplicar una crema hidratante en las manos, y por supuesto, adquirir esta u otros productos cosméticos.
Creemos que ha sido un éxito la iniciativa, que aún se puede disfrutar durante el resto de fines de semana de junio. Pero ya estamos esperando la nueva ¡No pierdas el norte! en la que se abrirá una ruta por esta zona durante casi todo el año.
2 comentarios